Es la parcela de la Odontología que se encarga del estudio, diagnostico y tratamiento de las enfermedades que afectan a los tejidos de inserción del diente (hueso alveolar, ligamento periodontal, raíz y encía). Coloquialmente se conocen como «piorrea» pero el termino correcto es Periodontitis.
EL agente causante es el acumulo de Placa Bacteriana y formación de sarro. Estas bacterias que conviven con nosotros pueden desarrollar enfermedades si no tenemos una higiene correcta. Existen diferentes factores que intervienen en la aparición de la Enfermedad Periodontal, como pueden ser trasmisión genética, el PH de la saliva, la edad, ausencia de piezas, enfermedades sistémicas, etc. El objetivo de los dentistas es ayudar a los pacientes con Periodontitis a crear y mantener una salud oral, una funcionalidad y estética óptimas. Para lograrlo se han desarrollado diversos procedimientos terapéuticos adaptados a los diferentes grados de gravedad de la enfermedad periodontal.
El primero y más importante sería la prevención del problema para lo que necesitamos una Promoción y Enseñanza correcta en Higiene Oral para disminuir el acumulo de placa bacteriana que es el origen del problema. Un correcto cepillado es fundamental además de usar seda y colutorios apropiados.
Aunque realizamos una limpieza adecuada posiblemente en algunas zonas de más difícil acceso se formen cálculos o placas de tártaro (sarro). Por ello, es recomendable profilaxis periódicas (cada 6-12 meses).
La Tartrectomía o limpieza bucal consiste en eliminar con ultrasonidos esas «piedrecitas» que, con el cepillado, no desaparecen. Posteriormente, con pastas y cepillos especiales se pulen todas las superficies para disminuir la adherencia de la placa bacteriana y nueva formación de sarro. Si el acumulo de tártaro es mayor, la encía se inflama, duele y sangra. Es lo que se conoce como Gengivitis y puede que esa Tartrectomía necesite anestesia.
Si el proceso avanza y no acude al odontólogo, incluso se pueden formar BOLSAS PERIODONTALES, donde desaparece el ligamento periodontal. El diente pierde inserción y puede llegar a tener movilidad. En algunas zonas el hueso desaparece y se producen RECESIONES GINGIVALES (la encía baja o desaparece). Esta fase se conoce como PERIODONTITIS y se distinguen diferentes tipos:
Los tratamientos van a consistir en la eliminación del sarro, en ocasiones quirúrgicamente, para acceder a esas BOLSAS PERIODONTALES, medir y controlarlas. si fuera necesario en ocasiones debemos REGENERAR el tejido duro y blando perdido. A continuación, detallamos una tabla con los posibles PRONOSTICOS de los dientes afectados periodontalmente.
La PERDIDA ÓSEA la medimos radiográficamente, las BOLSAS PERIODONTALES con una sonda con regla, al igual que la FURCA y observamos y palpamos la MOVILIDAD. Para la clasificación debe cumplirse como mínimo uno de los parámetros (dos para dientes con mal pronóstico).
Por ello es importante acudir a todas tus revisiones, para que nuestro especialista en periodoncia controle el acumulo de sarro y pueda realizar la correspondiente limpieza de las encías. El tratamiento dependerá de la fase en la que se encuentre la enfermedad periodontal desde una limpieza profunda de las encías o raspado y alisado radicular con curetas, hasta la cirugía si es necesario para poder eliminar correctamente las bolsas bacterianas.
Una vez realizado el tratamiento periodontal es necesario que el paciente acuda a clínica para revisar y confirmar que la infección ha desaparecido y no se ha producido más daño.
La elección entre la regeneración periodontal para salvar el diente o su extracción y la colocación de una PROTESIS es una de las decisiones más complejas y cuestionables a las que se enfrenta el dentista en su práctica diaria.
Asignar un pronostico u otro suele ser complicado y la decisión tiene un importante impacto sobre la planificación del tratamiento y el estilo de vida del paciente.